Amigo, decir te lo dije esta de más en estos momentos, pero cuando tuve la oportunidad de estar en tú despacho en la Corte Suprema de Justicia (CSJ) la primera vez, recién te dieron el puesto de Magistrado lo comentamos, que eras un hombre intelectual y lo que te había costado pecuniariamente tu preparación en materia constitucional acá y fuera de El Salvador, por lo que te dije algo más o menos así: "cuídate estás entrando a un mundo oscuro, distinto y tramposo de la política salvadoreña, va depender de vos como bailes para que dures en el puesto y te jubiles si la sabes hacer" y todavía te acote "que quedaba a tus órdenes", lo cual sigue en pie, razón por la cual te escribo con la confianza del caso, no para llorar por la leche derramada en el piso, sino por el contrario Rodolfo, te escribo para decirte estoy contigo, se cayó se cayó, juntemos más leche, porque esto que te están haciendo a vos de señalarte y acusarte por tus situaciones familiares de una manera pública, para justificar el quitarte del camino me recuerda el refrán que: "qué sólo al árbol que da fruto le tiran piedras" y eso te pasó, has dado tus frutos intelectuales los cuales no son bien visto y ahora por eso te desean hacer aún lado, porque están desesperados, como fieras heridas, que no saben como sacarte, para que no sigas lacerando sus intereses mezquinos y no de nación como los vez vos, desde tu perspectiva académica y vieron en el tema de la violencia intrafamiliar un defecto tuyo en el cual pueden hacer techo de vidrio y apedrear, a esto era a lo que me refería Rodolfo en aquella ocasión que nos vimos en tú oficina, como: "oscuro, distinto y tramposo" de esto deseaba que te cuidaras, porque conocía tus capacidades y esto era algo fácil de avizorar para los que te conocíamos amigo.
Mira venga lo que venga para vos, luego de las vacaciones de agosto, siempre podrás estar a gusto y dormir tranquilo de haber hecho bien lo que juraste al tomar posesión de tu cargo como Magistrado de la CSJ.
Pero eso sí, siempre cuídate de los aduladores por favor, como comentábamos ayer con nuestro Maestro Luis Armando González González, porque ese tipo de personas nunca te van a llevar a una buena parte, porque jamás te van avisar cuando vayas rumbo al despeñadero.
Para que no caigas en estos derroteros innecesarios y tomes lección aprendida de la situación, porque no se vale que hagan utilitarismos de temas tan sensibles e importantes por la reivindicación de los derechos de las mujeres, para eliminar intelectuales como vos, que como cualquiera que tiene relaciones de familia o con terceros, así como aquellos que hoy te acusan, no sea alterado en una discusión, con la diferencia que no han llegado quizá a los juzgados, como desgraciadamente fue tu caso, no quiero justificar con esto que no se denuncien hechos de violencia, lo que no me parece es, esa doble moral con la que te juzgan, me recuerdan las palabras de Jesús de Nazareth, en relación al momento de apedrear a la prostituta "el que este libre de pecado que tire la primera piedra", lástima que faltaron personas que les recordaran esto a los que hoy se llenan la boca señalándote y juzgándote dos veces por la misma causa, eso Rodolfo es lo que me molesta, la desvergüenza con la que lo hacen como limpios de todo acto de este tipo contra otro.
Adelante Señor Magistrado y siga defiendo la Constitución como corresponde y mejor lo sepa hacer, porque gente como Vos es la que le hace falta esté país, preparada, educada y que saben del tema, lastima que nuestro sistema político se encuentre estructurado, para que alguien menos preparado que vos, te elija para el puesto y para mí de ahí es de donde parte le problema que hoy vivimos en El Salvador, porque aunque nuestra Asamblea Legislativa (AL) tome una decisión colegiada para las elecciones de segundo grado, la pregunta es ¿quiénes son los miembros de la Honorable AL? en nivel académico frente a Ustedes como miembros de la Sala de lo Constitucional, o los demás funcionarios que se escogen por está vía, cuando para ser diputado la Constitución únicamente en términos académicos exige instrucción notoria.
Con aprecio.
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