Compañero de la Academia Salvadoreña, quiero aprovechar para felicitarte ahora que has sido nombrado Presidente de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), luego de una serie de complicaciones para que puedas optar a tan digno cargo.
Son Salomón de las cosas que te llenan de honor y orgullo ajeno, el haber tenido la oportunidad de compartir pupitre con personas como vos, Rodolfo, entre otros que por brevedad a mi intención no menciono uno a uno y que representa muy bien al curso en los diferentes ámbitos nacionales e internacionales.
Sabes bien la formación académica que nos dieron uno a uno nuestro Maestros, especialmente Luis Armando González González, espero que tengas la oportunidad de aplicarlo como corresponde y de verdad te deseo todo lo mejor en el cargo, podes contar conmigo, sabes que sin ningún otro interés que el que puede vincular a dos compañeros de estudios preocupados desde siempre por el bien de nuestro país y creo que en está misma línea encontrarás al resto de tus compañeros de salón de clase, pues todos convergimos en un estudio común que nos llevó a conocernos.
Adelante compañero, que la lucha apenas inicia para vos por el bien del país, desde el nuevo cargo que ostentas, gracias a la decisión política que por las razones que sea, vio en vos la persona que podía no sólo desentrampar la situación política que llevó a tú elección como Presidente de la CSJ, sino también tus capacidades académicas que te dan amplia solvencia para ostentar tu cargo con la hidalguía que te caracteriza Salomón.
Espero tener muy pronto la posibilidad de saludarte ya sea en tu despacho o en algún evento que coincidamos.
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